Durante este 2024, se ha atendido en el Centro de Atención, Valoración y
Rehabilitación de fauna silvestre del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, a un
total de 18 aves migratorias que ingresaron al territorio metropolitano en busca de
refugio y alimento y terminaron en alguna situación de emergencia.
Entre las especies atendidas, se destacan el atrapamoscas verdoso con cinco
individuos, seguido por el gavilán migratorio con tres, el cuco americano y el sirirí
migratorio con dos cada uno, y una variedad de otras especies como la polluela
migratoria, el chotacabras norteño, la reinita castaña, la mirla buchipecosa, el
picogordo degollado y el guardacaminos de carolina.
“Un gran espectáculo viene sucediendo en nuestro Valle de Aburrá, el paso de las
aves migratorias, las cuales desde octubre del año pasado vienen migrando desde
otros territorios por condiciones climáticas y cambios estacionales”, indicó Andrés
Gómez, supervisor del Centro de fauna silvestre.
Es importante resaltar que estas aves migratorias abarcan una diversidad de
especies, incluyendo patos, aves rapaces, pequeños pájaros, garzas, gallinas
ciegas, atrapamoscas, turpiales, golondrinas y tringas, entre otras. El fenómeno
migratorio, es un proceso natural en el cual las aves se desplazan
significativamente en busca de mejores condiciones climáticas y mayor
disponibilidad de alimento, presenta desafíos para estas especies, especialmente
cuando atraviesan áreas urbanas: edificios, ruido, pérdida de hábitat y
contaminación lumínica que pueden representar riesgos para su supervivencia.