¿Qué pasa con Hidroituango?

-El proyecto pasó de costar 12 billones de pesos a 18.3 billones de pesos

-En el 2022 entrarían a operar las primeras dos máquinas generadoras de energía, y
cada año siguiente entrarán en funcionamiento dos máquinas más hasta el 2025
que opere en su totalidad el proyecto

En los últimos tres años hemos estado a la expectativa de Hidroituango, un proyecto de
suma importancia no solo para el departamento de Antioquia si no para el país, ya que, de
lograrse su puesta en marcha en 2022, generaría gradualmente el 17% de la energía para
Colombia. ¿Pero qué ha pasado en este tiempo? ¿Cómo está hoy la situación de este
megaproyecto? ¿Será posible su puesta en marcha el próximo año? ¿Y la propuesta de
venta a EPM en qué quedó?

Desde los años 70s se tuvo visión para este proyecto, en 1979 se realizaron estudios de
prefactibilidad en Farallones, Cañafisto e Ituango y aunque unos años después
contemplaron de manera oficial la viabilidad de estos estudios, con la expedición por parte
de la Asamblea de Antioquia de la Ordenanza #35 del 29 de diciembre de 1997, se creó la
Sociedad Promotora Pescadero Ituango S.A. (como empresa de economía mixta del nivel
departamental que tendría como objetivo el diseño, construcción y explotación a nivel
nacional y/o internacional la Central Hidroeléctrica Pescadero), en la que participaron más
de 50 firmas de ingeniería, esta ordenanza tuvo como propósito aparte de crear esta
sociedad, determinar la participación del Departamento de Antioquia, del IDEA, EADE,
además de especificar que los socios de la empresa serían entidades oficiales o privadas
de orden municipal, departamental o nacional, así mismo especifica que el capital mínimo
de esta sociedad sería para ejecutar los estudios definitivos para la ejecución del proyecto.
Los diseños finales fueron terminados en el 2006. En el 2008 el Ministerio de Minas declaró
de utilidad pública los terrenos necesarios para la construcción del proyecto. En 2009 el
Ministerio del Medio Ambiente le otorgó la licencia ambiental a la hidroeléctrica, empezando
la construcción en noviembre del año 2010.
Actualmente el proyecto es llevado a cabo por un consorcio entre Empresas Públicas de
Medellín y el Departamento de Antioquia. Según información de Hidroituango, los
accionistas que componen esta sociedad están distribuidos en los siguientes porcentajes:
el Instituto para el Desarrollo de Antioquia (IDEA) 50,7%, Empresas Públicas de Medellín
46,3%, Departamento de Antioquia 2,1%, Central Hidroeléctrica de Caldas S.A. 0,14%, La
Nación 0.077%, Financiera Energética Nacional S.A. 0.035% y Accionistas Minoritarios
0.52%.

En 2018 ocurrió la tragedia conocida por todos, que hasta el año en curso sigue dejando
graves secuelas y consecuencias económicas para los socios, el taponamiento del túnel
auxiliar para desviar el río Cauca produjo una contingencia de magnitudes importantes,
tanto por el riesgo de avalancha como por la urgencia de una subasta de energía para cubrir un posible déficit eléctrico entre 2022 y 2023. Según el periódico El Tiempo, un estudio de Skava Consulting señaló que esta situación obedeció a un error de diseño de la excavación, que al momento de ejecutarse no se trató de forma adecuada.

Esto a su vez aumentó los costos del proyecto, pues tenía un valor inicial de cerca de $12
billones de pesos, pero se incrementó con la reconstrucción, la atención a damnificados y
daños ambientales, a 18.3 billones de pesos, incremento de 6.3 billones, que equivale a
una cifra muy superior, al presupuesto total de la gobernación de Antioquia para la vigencia
fiscal 2021.
El pasado 26 de marzo, en la Asamblea de Antioquia invitamos a EPM para hablar del
avance del proyecto, y conocimos que a corte de febrero la evolución estaba en un 81.4%
y aseguró la entidad que en el 2022 entrarían a operar las primeras dos turbinas
generadoras de energía, y cada año siguiente entrarán en funcionamiento dos máquinas
más hasta el 2025, que se espera opere en su totalidad. Actualmente Hidroituango avanza
en un 84% según un artículo publicado por BluRadio el pasado 14 julio del 2021.

El panorama para el funcionamiento en el año 2022, se visualiza con mucha expectativa,
confiamos en que los informes técnicos elaborados por los especialistas sobre el tema,
puedan llevar a que el año entrante se enciendan las primeras turbinas que generen energía para el departamento y el país. La gran apuesta del gobierno es poner en funcionamiento la que sería la principal generadora de energía para Antioquia y una de las más grandes para Colombia, de hecho, sería un gran paso, en esa búsqueda de rentas frescas para nuestro departamento, que se perciban ingresos no dependientes de los impuestos que hoy son decrecientes en Antioquia, cabe mencionar, que nuestros ingresos hoy dependen de unas rentas decadentes generadas de la venta de licores, juegos de azar, entre otros. Así que este proyecto necesita de la mejor energía para que pueda entrar en operación si o si en el 2022.

Recientemente, el gobernador encargado de Antioquia, Luis Fernando Suárez, hizo una
propuesta a EPM de venderle sus acciones, esta participación consta del 52% conformada
por el IDEA y la Gobernación, una de las principales bases de esta iniciativa es evitar que
los conflictos jurídicos actuales entre las empresas trasciendan, además, según el
gobernador, le permitiría, en su justa y adecuada proporción minoritaria, contar al
departamento con unos recursos seguros anuales producto de las utilidades de EPM.
Frente a esta propuesta considero que desde el punto de vista de la diversificación de la
inversión podría ser atractiva para el departamento. Con la venta de las acciones de
Hidroituango a EPM, la gobernación entraría a ser socia minoritaria de EPM que tiene
diferentes frentes de trabajo y fuentes de ingresos, como por ejemplo, las
telecomunicaciones, el gas, las inversiones en hidroeléctricas, inversiones en el extranjero,
entre otros; de esta manera la Gobernación de Antioquia sería parte de un conglomerado
que tiene inversiones en múltiples sectores, lo que permite que la inversión esté
redistribuida y de esa manera la Gobernación pueda tener ingresos, para inversión, desde
el momento en que se haga la negociación.

No obstante, también es necesario pensar en el poco beneficio y compensación económica
que hoy reciben los municipios productores de agua en Antioquia (Ley 56 de 1981), que
son más de 50 de 125, el preciado líquido que sale de estos municipios, por muchos años
ha sido la materia prima para el funcionamiento y operación de EPM, como los de las
subregiones del Oriente, Norte y Nordeste, entre otros; así mismo, vale la pena tener en
cuenta a los municipios aguas arriba de la presa, la esperanza permanente de los
ciudadanos que habitan estos territorios, es que las regalías y el impuesto predial, sean el
camino para que llegue la tan anhelada inversión.

Sin embargo, el pasado 29 de julio del 2021, el periódico El Colombiano, publicó una noticia en la que la junta directiva de EPM manifestó interés por la posibilidad de dicha compra, pero no vio posible la forma de pago presentada por la gobernación, es decir, el pago con acciones de EPM, por lo que planteó que se estudie dentro de las mesas de negociación el pago a través de recursos ordinarios, es decir, en efectivo; frente a esta situación, manifestó el gobernador encargado Luis Fernando Suárez que no le venderá a privados y en caso que EPM pague con dinero, tampoco habría negocio.

No obstante, de manera concomitante a la propuesta de venta anunciada por el gobernador
al alcalde de Medellín, avanza el tribunal de arbitramento liderado por la Gobernación de
Antioquia, cuyo propósito es que EPM le pague el lucro cesante (dineros dejados de
percibir) por la contingencia del megaproyecto, el cual está bajo la responsabilidad de
construcción de EPM, situación que en caso de que la gobernación gane este proceso, la
suma a pagar por EPM, seria multimillonaria.

Así las cosas, la expectativa continúa, la invitación es a pensar en un acuerdo donde
ambas partes se beneficien, a pensar en el futuro económico de todo el pueblo antioqueño,
tarde o temprano Hidroituango estará en funcionamiento, lo cual, será de orgullo no solo
para Medellín y Antioquia, sino para todos los Colombianos.

En la búsqueda permanente de rentas frescas para nuestro departamento, lo que no sería
viable hoy, es pensar en vender Hidroituango por dinero en efectivo, Antioquia a la fecha,
no tiene mejor prospectiva de inversión a largo plazo, que la que sería una de las mayores
productoras de energía eléctrica del país.

Sin duda alguna, Hidroituango como patrimonio de todas y todos los antioqueños, debe
salir adelante.


Luis Gabriel Gómez Grisales
Diputado Asamblea de Antioquia
Artículo de opinión