Elkin Mauricio Zapata, una historia de vida guiada por el trabajo social y la nobleza

“El trabajo social y comunitario es lo que siempre me ha llamado la atención, más allá de un cargo público es la huella que dejamos en las personas y la ayuda que le podemos brindar a quien realmente lo necesita”.

Elkin Mauricio Zapata tiene 43 años, es Tecnólogo Ambiental y actualmente cursa séptimo semestre de Administración pública, es el mayor de dos hijos, sus padres Beatriz Elena Carvajal y Ramón zapata ven con orgullo que su hijo se preocupe por el bienestar de las personas, al igual que su hermana menor, Paola Andrea Zapata, quien ve en “mauro”, como lo llama, un hombre carismático y apasionado por el servicio social.

“Mauro es un hombre divertido, alegre, contagia con su magia, sencillo, tiene una esencia que no ha perdido con el paso de los días, es un excelente amigo, consejero, que está en las buenas y las malas, y antes que mencionar sus bondades como político y concejal, hay que resaltar que es un ser humano virtuoso y valioso como persona”, comentan sus amigos.

Su recorrido laboral ha sido amplio, lo que le ha permitido sumar experiencia en el campo del deporte, “fui Cadi de golf y futbolista del Deportivo Rionegro, cuando trabajaba como Cadi lo alternaba con mis estudios y con el deporte”, expresa con nostalgia y emocionalidad Mauricio, este hombre emprendedor y echado para adelante quiso buscar alternativas diferentes, lo que lo llevó a mudarse a la ciudad de Cartagena a emprender como comerciante, “me fui a buscar un rumbo diferente, otras alternativas de vida y aprendí muchísimo, es más de allí nace mi aprecio por el comercio, son personas muy valiosas para el desarrollo y crecimiento de las ciudades y municipios”, agrega Zapata.

“Cuando regresé de nuevo a Rionegro seguí trabajando con el gremio y tiempo después ingresé a trabajar a la Secretaría de Salud de Rionegro a realizar control y vigilancia a los establecimientos públicos y a los comerciantes que tanto admiro, posteriormente, tuve la oportunidad de pasar a la Secretaría de Medio Ambiente a apoyar con los mejoramientos en sistemas sépticos, movimientos de tierra y vertimientos de aguas residuales a quebradas”, añade. Gracias a toda esa experiencia logró tener más acercamiento con las comunidades y descubrir la pasión y amor por los animales.

En el trasegar de la vida, conoce a quien hoy es su esposa y compañera de vida, Bibiana Botero, “una mujer excepcional, luchadora, que me motiva día a día para salir adelante y la que me da palabras de ánimo cuando las cosas no se tornan de la mejor manera”, comenta el concejal, de esta unión hoy tienen un hogar ejemplar con dos hijos; Juan José Zapata de 22 años, estudiante de Ingeniería Urbanística y graduado de Mecánica de Aviones y Simón Zapata de 16 años quien está terminando sus estudios de bachillerato, “dos muchachos comprometidos con el deporte, el estudio y el servicio social”, expresa Mauricio con un brillo único en sus ojos.

Desde joven le ha gustado ayudar a los demás, apoyar causas sociales y velar por el bienestar de las personas que tiene a su lado, “la iniciativa de lanzarme como candidato al Concejo de Rionegro surgió en una reunión de amigos que me motivaron por mi carisma y entrega al servicio, aunque siempre me había apasionado el tema, jamás pensé estar en un cargo tan representativo como es ser concejal”, y es que es Mauricio Zapata es querido y admirado por muchos rionegreros, las personas más cercanas a él dicen que “para describir a Mauricio Zapata se quedan cortas las palabras , pero si existe una que le hace mucho honor y es la nobleza, es un hombre de corazón justo, generoso, solidario, de principios y valores. Acompañarlo en este trasegar de lo publico ha sido un privilegio porque es evidente el amor con el que le ayuda a los demás, esto se ha convertido en su motivación de todos los días”.

Hoy se habla de un grupo de trabajo que une esfuerzos, carisma, habilidades, calor humano y empatía, un equipo interdisciplinario que se preocupa por ayudar a los demás, que trabajan guiados por tres pilares: la comunidad, el bienestar animal y ambiental, “Juntos en Maza, es un equipo que hoy hemos consolidado gracias a la unión de varios amigos y personas que han creído en nuestro trabajo, personas sensibles que pensamos en el bienestar de la comunidad”, menciona Mauricio.

“El trabajo social y comunitario es lo que siempre me ha llamado la atención, más allá de un cargo público es la huella que dejamos en las personas y la ayuda que le podemos brindar a quien realmente lo necesita”.

Elkin Mauricio Zapata tiene 43 años, es Tecnólogo Ambiental y actualmente cursa séptimo semestre de Administración pública, es el mayor de dos hijos, sus padres Beatriz Elena Carvajal y Ramón zapata ven con orgullo que su hijo se preocupe por el bienestar de las personas, al igual que su hermana menor, Paola Andrea Zapata, quien ve en “mauro”, como lo llama, un hombre carismático y apasionado por el servicio social.

“Mauro es un hombre divertido, alegre, contagia con su magia, sencillo, tiene una esencia que no ha perdido con el paso de los días, es un excelente amigo, consejero, que está en las buenas y las malas, y antes que mencionar sus bondades como político y concejal, hay que resaltar que es un ser humano virtuoso y valioso como persona”, comentan sus amigos.

Su recorrido laboral ha sido amplio, lo que le ha permitido sumar experiencia en el campo del deporte, “fui Cadi de golf y futbolista del Deportivo Rionegro, cuando trabajaba como Cadi lo alternaba con mis estudios y con el deporte”, expresa con nostalgia y emocionalidad Mauricio, este hombre emprendedor y echado para adelante quiso buscar alternativas diferentes, lo que lo llevó a mudarse a la ciudad de Cartagena a emprender como comerciante, “me fui a buscar un rumbo diferente, otras alternativas de vida y aprendí muchísimo, es más de allí nace mi aprecio por el comercio, son personas muy valiosas para el desarrollo y crecimiento de las ciudades y municipios”, agrega Zapata.

“Cuando regresé de nuevo a Rionegro seguí trabajando con el gremio y tiempo después ingresé a trabajar a la Secretaría de Salud de Rionegro a realizar control y vigilancia a los establecimientos públicos y a los comerciantes que tanto admiro, posteriormente, tuve la oportunidad de pasar a la Secretaría de Medio Ambiente a apoyar con los mejoramientos en sistemas sépticos, movimientos de tierra y vertimientos de aguas residuales a quebradas”, añade. Gracias a toda esa experiencia logró tener más acercamiento con las comunidades y descubrir la pasión y amor por los animales.

En el trasegar de la vida, conoce a quien hoy es su esposa y compañera de vida, Bibiana Botero, “una mujer excepcional, luchadora, que me motiva día a día para salir adelante y la que me da palabras de ánimo cuando las cosas no se tornan de la mejor manera”, comenta el concejal, de esta unión hoy tienen un hogar ejemplar con dos hijos; Juan José Zapata de 22 años, estudiante de Ingeniería Urbanística y graduado de Mecánica de Aviones y Simón Zapata de 16 años quien está terminando sus estudios de bachillerato, “dos muchachos comprometidos con el deporte, el estudio y el servicio social”, expresa Mauricio con un brillo único en sus ojos.

Desde joven le ha gustado ayudar a los demás, apoyar causas sociales y velar por el bienestar de las personas que tiene a su lado, “la iniciativa de lanzarme como candidato al Concejo de Rionegro surgió en una reunión de amigos que me motivaron por mi carisma y entrega al servicio, aunque siempre me había apasionado el tema, jamás pensé estar en un cargo tan representativo como es ser concejal”, y es que es Mauricio Zapata es querido y admirado por muchos rionegreros,  las personas más cercanas a él dicen que  “para describir a Mauricio Zapata se quedan cortas las palabras , pero si existe una que le hace mucho honor y es la nobleza, es un hombre de corazón justo, generoso, solidario, de principios y valores. Acompañarlo en este trasegar de lo publico ha sido un privilegio porque es evidente el amor con el que le ayuda a los demás, esto se ha convertido en su motivación de todos los días”.

Hoy se habla de un grupo de trabajo que une esfuerzos, carisma, habilidades, calor humano y empatía, un equipo interdisciplinario que se preocupa por ayudar a los demás, que trabajan guiados por tres pilares: la comunidad, el bienestar animal y ambiental, “Juntos en Maza, es un equipo que hoy hemos consolidado gracias a la unión de varios amigos y personas que han creído en nuestro trabajo, personas sensibles que pensamos en el bienestar de la comunidad”, menciona Mauricio.

Este líder social y político se ha destacado en su labor como concejal por proyectos como el cero uso de plásticos de un solo uso, vivienda para el mejor deportista del municipio, mejoramiento y adecuación del Ceiba, creación de Nutriceres, velar por personas con discapacidad apoyándolas con empleo, entre muchas otras labores que se quedan cortas en el papel para mencionar.