Luz Nidia Alzate retornó hace dos años a la vereda Vallejuelo de San Carlos, después de vivir desplazada en el Municipio de Envigado en donde todo le faltaba y ahora en tierra propia aprecia más que nunca lo que le brinda la naturaleza y por eso no tiene sueños, tiene grandes proyectos para su finca que está en una ubicación privilegiada a poco más de 1000 metros sobre el nivel del mar.
A doña Luz Nidia el retorno a San Carlos le ha abierto un mundo de posibilidades. Hace parte de la Granja escuela de Cornare en donde se capacitan 30 personas en todo lo relacionado con la agricultura orgánica y ya tiene cultivos de plantas medicinales y aromáticas, verduras y un área para maderables. Como parte de su finca es bosque nativo, la ingresaron al programa Banco2 como protectora de bosques y recibe cumplidamente la platica que le sirve para comprar los alimentos que no produce.
Está en lista para recibir próximamente la estufa eficiente y la construcción de pozo séptico por parte de la Corporación y como está tan entusiasmada, proyecta ofrecer su finca como hotel para aquellas personas amantes del bosque, las cascadas y la fauna silvestre. Ya le tiene nombre: “Refugio en la Montaña” y no le interesa mucho que le pongan el servicio de energía porque sin luz el ambiente es más autóctono. En el refugio también habrá sendero ecológico, porque por su finca pasa un camino ancestral que comunica a San Carlos con Guatapé.
Sus productos los lleva al mercado de San Carlos porque no le alcanza para cubrir más, gracias a la demanda que tienen en varios restaurantes de “la playita dulce del Oriente” y destaca que la felicidad de que goza ahora su familia se la deben en gran parte al apoyo que les ha ofrecido Cornare para practicar la agricultura limpia y sacar adelante sus proyectos.