Sergio Alejandro Mejía, Sam, es un rockero, como él mismo se denomina y tiene una colección de guitarras hechas a mano, sin comprar ninguna de las piezas, inspiradas en los comics y los súper héroes, con las cuales está formando un museo, el cual considera que será el más grande de Medellín y de Colombia.
Nacido en Bello pero residente en Medellín desde niño, hace siete años comenzó con la idea de fabricar guitarras y la primera fue utilizando piezas de un Nintendo. Ahora tiene guitarras de las Tortugas Ninja, del Capitán América y hasta del Chapulín Colorado y todas funcionan como cualquier guitarra eléctrica.
Antes había trabajado ocho años como locutor en RCN Radio y como le gusta la cultura americana, tiene tatuado a Estados Unidos y sus sobrinos le llaman como Tío Sam. Desde pequeño se ha movido con los clásicos del Rock, pero interpreta lo que le pidan, porque es un músico para todos los géneros, pero de corazón es rockero.
Cuando tenía las primeras 15 guitarras escribió a los directivos de varios centros comerciales de Medellín, ofreciendo su música y su colección de instrumentos y en Unicentro le abrieron las puertas y expuso durante 18 días. Ha estado con sus instrumentos en varias ciudades del país y recientemente en el Centro Comercial San Nicolás de Rionegro. No solo muestra sus guitarras, sino que invita a la gente a que cante con él.
La invitación que hace Sam es a que persigan los sueños, porque es feliz cantando y tocando sus guitarras personalizadas.
